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MASONERÍA Y LA TRIPLE ALIANZA CONTRA PARAGUAY
(01) El genio invisible.
(02) Fuentes.
(03) Fuentes.
El genio invisible.
En Asunción ya se sabe de la invasión brasileña a la Banda Oriental, y tal vez por sugerencia de López, Sagastume destaca al santafesino José de Caminos para que le proponga a Urquiza el “pronunciamiento” contra Buenos Aires, seguido de una triple alianza con Paraguay y el gobierno “blanco” de Montevideo. Urquiza ya no era el Comandante en jefe del Ejército de la Confederación, como en las vísperas de Caseros, pero aún mantiene cierto prestigio y el mito entre los esperanzados federales. Juega Urquiza en la misma forma que en 1851: sin definirse para ningún lado, entretiene como entonces a los comisionados que le piden el “pronunciarse” durante todo el mes de octubre de 1864. Se convertía así en el árbitro de la situación. Su posición incluso era más cómoda que entonces, porque en vez de aliarse a un país extranjero, le bastaba seguir el clamor de todo el país y desalojar a la camarilla liberal de Buenos Aires que era funcional a la política hegemónica del Imperio. El gran culpable de la entrega del Plata a los brasileños a partir del 3 de febrero de 1852, tenía ahora servida en bandeja de plata la posibilidad de lavar aquella mancha oprobiosa de Caseros. Sin embargo no se decidía: ¿cuáles eran las causas reales y concretas de su actitud, además de sus compromisos políticos y la defensa de sus intereses particulares? Tal vez la respuesta nos la proporcione Alcibíades Lappas, en su libro “La masonería argentina a través de sus hombres”:
“Urquiza Justo José (1801-1870). Iniciado joven en las actividades comerciales, al radicarse en Concepción del Uruguay, llegó a adquirir extensísimas y ricas estancias… (…)
Tuvo en su haber numerosas victorias pero sin lugar a dudas la más brillante y la que le sirvió para lavar su pasado político fue la de Caseros que marcó la derrota del tirano Rosas. Urquiza que fue virtual dueño de la provincia, era hombre de confianza de Rosas, a quién sirvió lealmente durante cuatro lustros. Repentinamente cambia de actitud, primero en el orden interno provincial a partir de 1847, y cuatro años más tarde en el orden nacional. Ese cambio de actitud significó una mayor corrección de procederes públicos y privados (…)
Llama la atención ese cambio repentino y la coincidencia de fechas.
No es aventurado afirmar –continúa Lappas- que la influencia de las enseñanzas masónicas fue decisiva a ese respecto y da pie para ese aserto la coincidencia de fechas entre su iniciación, en 1847, y su cambio de actitud en el gobierno, reflejado también en el cambio de sus colaboradores. Generosamente contribuyó a la adquisición y al adorno del Templo Masónico de la Logia Jorge Washington. Por tal motivo el Supremo Consejo de la República Oriental del Uruguay le expresó su reconocimiento y aplauso otorgándole el grado 18°. Emprendió su célebre campaña contra la tiranía de Rosas y el 3 de febrero de 1852, fugado del país el dictador, Urquiza entró en Buenos Aires y se hizo cargo del gobierno nacional, y convocó a los gobernadores de provincia a la reunión de San Nicolás de los Arroyos, contando para eso con la ayuda del joven masón, el Dr. B. de Irigoyen, donde suscribieron el famoso acuerdo, base de la formación constitucional de la República. La disidencia posterior del Estado de Buenos Aires, originó la separación de esta provincia del resto de la Confederación. Urquiza se instaló en Santa Fe y allí se reunió la convención que dictó la libérrima Constitución de 1853 que aún rige el país. Fue electo luego presidente de la Nación Argentina e instaló su despacho en la ciudad de Paraná. Las luchas entre ambas partes terminaron con el triunfo de Urquiza en Cepeda y la firma del Pacto de San José de Flores, el 11 de noviembre de 1859, gracias a la decisiva intervención de la Masonería, y es así que en 1860 quedó sellada la unión nacional. Al obtenerse la pacificación después de Cepeda, el Supremo Consejo de la República Argentina acuerda otorgar al general Urquiza grado 33. A tal fin se afilia el agraciado a la Logia Confraternidad Argentina n° 2, la misma en que militaba, precisamente, el general Bartolomé Mitre. El día sábado 21 de Julio de 1860 junto al Dr. Santiago Derqui y los generales Bartolomé Mitre, Domingo Faustino Sarmiento y Juan Andrés Gelly y Obres, Urquiza recibe el grado 33°. Por otra parte, la Logia Unión del Plata n°1, de la que era miembro del Dr. Derqui, lo proclama su miembro honorario. El general Urquiza, en retribución de atenciones obsequió, por intermedio del Dr. Pedro de Vivar, a cada uno de los dignatarios de la Gran Logia de la Argentina, y de los miembros del Supremo Consejo de la Argentina, una medalla conmemorativa del primer aniversario del Pacto de San José de Flores “en prenda de reconocimiento –reza la nota respectiva– por vuestro eficaz apoyo para obtener la pacificación”. El 9 de agosto del 1861 la Logia Asilo del Litoral, de la ciudad de Paraná, lo proclamó su miembro honorario y le hizo entrega del diploma que lo acredita en tal carácter. Nuevas disidencias posteriores entre la Confederación y el estado de Buenos Aires, por otros motivos, dieron lugar a que se renovara la contienda. Esta vez también el general Urquiza supo dar la victoria a las armas de la Confederación en los campos de Pavón. Pero no obstante eso, el general victorioso, en magnífico gesto de autosacrificio y renunciamiento, se retiró a Entre Ríos dejando el campo de batalla a las fuerzas opuestas comandadas por Mitre, convencido que esa era la única manera de terminar con las disidencias y obtenerse la meta ideal de la pacificación definitiva. El presidente Derqui y el Vicepresidente Pedernera lo acompañaron en el gesto renunciando a sus cargos. La República quedó ya unificada bajo la presidencia de Mitre, al que Urquiza prestó su concurso político, al igual que lo haría más tarde con Sarmiento. El 20 de Agosto de 1863 el Supremo Consejo de Uruguay lo designa Miembro Honorario del mismo. Tanto los hijos varones como los yernos del general Urquiza fueron miembros de la masonería, teniendo muchos de ellos, destacada actuación en el seno de la Orden. (…)” ( )
(Agrecemos a Lappas la información que nos brindó)
También nos lo contó Mitre de su propia boca el 29 de septiembre de 1868, cuando en un banquete de la masonería, recordando la tenida del 21 de julio de 1860 (posterior a Cepeda) dirá en su discurso refiriéndose a esa batalla: “Cuando nos alejamos de las puertas del templo, nuestras espadas salieron de la vaina para cruzarse en los campos de batalla, pero aún sobre esa desgracia y esa matanza, el genio invisible batió de nuevo sus alas…". ¿Será el mismo “genio invisible” que habría dirigido la matanza del gauchaje federal de las provincias y el mismo “genio invisible” que provocaría la guerra contra el Paraguay? Cabe recordar que la tenida secreta del Supremo Consejo de la Masonería del 21 de julio de 1860, es la que otorga el Grado 33° a Mitre, Urquiza, Sarmiento y Juan Gelly y Obes. El Gran Comendador era José Roque Pérez. Nótese la actuación directa que tuvieron en la guerra del Paraguay todos ellos, incluido Roque Pérez que representó a Sarmiento en la ceremonia de instalación del gobierno títere en Asunción luego de la guerra, y cuyos integrantes pertenecían también a la masonería. ( ) También pertenecieron a la masonería otros personajes que tuvieron destacada y decisiva actuación en la guerra contra el Paraguay, como Pedro II, el conde D´Eu, el duque de Caxias, los generales Osorio y Menna Barreto, el Barón do Río Branco, Joaquín Marcelino de Brito, Saldaña Marinho y Deodoro da Fonseca. El Paraguay era el único país de América donde prácticamente no funcionaba la masonería, que se limitó a una logia transitoria clandestina en 1845 (Logia Pitágoras) y a una reunión masónica a bordo del “Locust” del Comodoro Ernest Hotham, (“Logia Volante Conway”). También fueron masones algunos disidentes paraguayos residentes en Buenos Aires, como el propio Loizaga. La primera logia masónica en Paraguay fue creada antes de la instalación del gobierno provisorio, bajo el patrocinio de Caxias en 1869:
“El 18 de enero de 1869, se instaló en Asunción, la primera Logia regular con el distintivo de FÉ, la que trabajó en el rito escocés, antiguo y aceptado, sobre los auspicios del Gran Oriente de Brasil, do Vale Beneditino do Río de Janeiro. La referida Logia fundó un asilo el 16 de julio de 1869 con el título distintivo de la misma Logia FÉ, que llegó a contar con mas de dos mil personas”. Coronel Francisco Vieira de Faría Rocha”. ( )
Leonardo Castagnino
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Fuentes:
- Castagnino Leonardo Guerra del Paraguay. La Triple Alianza contra los paises del Plata
- Lappas, Alcibíades, “La Masonería Argentina a través de sus hombres”. Buenos Aires 1.966.
- J.M.Rosa. Hist.Arg. / Atilio García Mellid. Proceso a los falsificadores de la Historia, t.I, p.335 y A.Lappas. La masonería en la Argentina”.
- J.J.Chiavenatto. Genocidio Americano. A guerra do Paraguay, p.75.
- www.lagazeta.com.ar
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