![]() Home CARTA DE FRANCISCO SOLANO A SU HIJO EMILIANO LÓPEZ (Guerra del Paraguay) (01) Introdución (02) Texto de la carta (03) Fuentes. (04) Artículos relacionados. Breve introducción A continuación transcribimos el texto completo de la carta que Francisco Solano López le enviara a su hijo Emiliano López, durante la Guerra se la Triple Alianza contra el Paraguay. De esta interesante y emotiva carta, el lector podrá deducir la personalidad de Francisco Soláno López, a quien algunos contemporáneos y ciertos panegiristas tildaron brutal tirano bárbaro. Texto de la carta (1) Azcurra, Junio, 28 de 1869 Mi querido hijo Emiliano: No sé si habrán llegado a tus manos mis anteriores de Abril; pero me temo que no hayas recibido la primera lo que sentirla, por o mucho que te hablaba en ella, como fue dirigida: al General Dix, ministro de los Estados Unidos, que ha sido relevado, su sucesor, probablemente, no habrá tenido mucho empeño en hacértela llegar, como decía en mi última. Entonces te anunciaba un próximo viaje a los Estados Unidos, y ahora que regresa para su país el General Mac Mahon, es llegado el tiempo que lo verifiques. Te he recomendado mucho a esté caballero, que gustoso acepta la recomendación y quiere servirte de guía. Yo cuento de que tú serás dócil a sus indicaciones y direcciones, por tu propio bien, y que no le ocasionarás el menor disgusto y mucho menos bochornos en ningún sentido, sino que diligente y caballeresco, dejarás todo entretenimiento infantil y procurarás empeñosamente formarte el hombre estudioso y serio que ha de darme satisfacción, y ha de ser útil a la Patria y a sus pobres hermanitos, de quienes tú, en mi falta, serás única esperanza y apoyo. No se trata de un paseo de holganza y entretenimiento, sino de práctica de la vida y el estudio más asiduo y constante que te ha de formar en el mundo. Muchos años has pasado ya en Europa, sin que yo haya notado un provecho real en tus estudios. Por el contrario, he tenido que deplorar más de una vez tu poco adelanto, debido a circunstancias de que no he sabido darme buena cuenta de la prolongada incomunicación en que esta malhadada guerra nos ha puesto, en el tiempo en que más precisabas tú de mis consejos y yo de tus noticias; sin embargo, las pocas palabras que de tiempo en tiempo me han llegado lejos de traer la consoladora prueba de tus adelantos, no han hecho sino avivar mis penas y cuidados, recordando que hubo un tiempo en que, con poca aplicación a tu verdadero adelanto, lo has descuidado todo para preferir entretenimientos fútiles y una sociedad inconveniente, como la de García, en vez de cultivar más estrechas relaciones con otros compañeros que, aunque apareciendo en condiciones más humildes están llamados a trabajar en el desarrollo de nuestra Patria en condiciones más o menos aventajadas según la ilustración de su laboriosidad y conducta hubieran podido conquistar a su regreso al seno de la Patria. Todo esto puedo decirte ahora, que te considero con mejor criterio, ahora que cuentas más años, circunstancias que me hacen esperar mejor apreciación de mis consejos y mejor logro a mis constantes deseos por tu cumplida educación, cultura y provecho. ![]() Como con el viaje que te proporciono a los Estados Unidos tendrías el tiempo sin ocupación, cosa demasiado pesada y reprochable en todo hombre de bien, quiero que para ocuparlo útilmente entres como estudiante en la oficina del abogado más hábil posible, para que tengas la ocasión de aprender la teoría y la práctica de las leyes, y el General Mae Mahon tiene la bondad de encargarse de buscarte una colocación, en la que según tu laboriosidad y contracción, sabrás atraerte la estimación y el respeto de los principales, y con ello mi más cumplida complacencia. Tú eres hasta ahora ajeno a la vida y puntualidad de oficina, pero te recomiendo muy de veras no dejarte jamás notar en tal género de falta, que siempre es dañosa para la reputación ulterior. Quiero lisonjearme, de que en breve tiempo aprenderás los principios teóricos, que han de guiar tus trabajos prácticos y formar tu inteligencia en el ramo, ofreciendo así a los principales del oficio un motivo de atención hacia ti y mira que cuando un joven tiene la desgracia de merecer, en lugar de atención, el reproche de sus principales, es muy penoso para su crédito en la vida futura. Y que no te arredre la enseñanza muda de un estudiante de abogado, que esto se vence con la contracción y el trabajo. . Según mis informaciones, las oficinas de abogado en Nueva York son preferibles a las de Washington para que un joven estudiante pueda aprovechar; y aunque en aquella ciudad la vida es más cara que en Washington, yo prefiero para tí una colocación allí donde has de tener la ocasión de una práctica más constante y variada, y así lo recomiendo al señor Mac Mahon, de cuya residencia quedarás también más cerca para cuando algún consejo necesites. Además, viviendo él cerca, podrá proporcionarte algunos conocimientos de honorabilidad y respeto, que tú, por tu parte, cuidarás de cultivar con empeñoso esmero, tratando de inspirar, si no algún interés, al menos simpatía. . Pero cuídate de hacer el conocimiento o la relación de hombres jóvenes ociosos y disipados que no te traerían sino el desprecio inmediato de las gentes sensatas y desgracias en el futuro; yo te recomiendo evitar tales escollos con la más cuidadosa precaución, como que nada será tan penoso para mi corazón como tu prematura pérdida. No es mi ánimo recluirte por completo en la oficina de un abogado, y deseo que llevando una vida laboriosa y contraída, también adelantes en la vida social, y tiempo tienes para esto después de haber cumplido con tus deberes diarios en la oficina, para cultivar la relación de las personas o familias honorables, cuyo conocimiento hayas podidos hacer. Por los informes que tengo, te convendría tomar en Nueva York, una pieza amueblada en un "Boarding House", tomando la comida en un hotel, cosa que me dicen costará, en todo, 1500 pesos americanos, por año, cuando más. En las épocas o estaciones del Congreso, puedes pasar a vivir en Washington, donde la vida es más barata, y tendrás la ocasión de ver el mundo político y diplomático, y si sabes merecer, como yo lo espero, serás admitido en ellos. Corno tus estudios de abogado no llevan por objeto recibir de los principales de la oficina ninguna compensación pecuniaria por el trabajo que puedas tener, puesto que ahora no buscarnos sino tu ilustración y adelanto, en el verano, cuando la población de Nueva York sale al campo, podrás tu hacer lo mismo, evitando, los lugares "fashionables" en donde no se gasta sino mucho dinero e inútilmente, y buscando las inmediaciones menos a la moda podrás pasar igualmente bien con menos dispendios, y hasta haciendo alguna economía.
Podrás también visitar otros Estados o ciudades, cuidando siempre de hacerlo con provecho y gastando lo menos posible; digo con provecho para tu instrucción porque debes tener un principio bien establecido, y es no mirar nada con indiferencia, sino bajo el punto de vista de su objeto, en relación a la razón y al provecho. Es decir darse cuenta de todo, porque de todo esto ha de venir un día en que necesitarás. ![]() Historia ![]() en facebook
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